El incremento de los precios marcó su nivel más alto en cuatro años

El incremento de los precios al consumidor en Lima Metropolitana, acumulado en los últimos meses marcó su nivel más alto en más de cuatro años. Esto luego de que cerrara en una tasa del 3,25%, según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI).

La inflación superó el rango meta del Banco Central de Reserva (BCR), establecido entre 1% y 3%, e incluso, el alza de precios fue un evento que trascendió la capital.

¿Que influyó en la inflación?

Para los economistas, existen dos temas claves para comprender la inflación al cierre de junio. En primer lugar, está la eventualidad de los factores que impulsaron los precios; en segundo lugar, el impacto transversal del tipo de cambio sobre la economía.

Juan Carlos Odar, profesor de macroeconomía de la Universidad Continental, señaló que el alza de precios que afectó el resultado de la inflación anual, ha sido provocado por el incremento de la cotización de algunos insumos internacionales. Tales como el petróleo, el maíz y el trigo, así como el aumento del tipo de cambio.

Asimismo, sostuvo que el despunte de la inflación es un evento transitorio y no implica una trayectoria continua al alza. Por lo que, previó que el índice de precios podría regularse durante el mes de julio.

“Pareciera que en las próximas semanas podría haber cierta estabilidad del tipo de cambio o por lo menos no seguir con la trayectoria tan marcada hacia el alza”, precisó.

Juan Carlos Odar, profesor de macroeconomía de la Universidad Continental

Por otro lado, el economista de Macroconsult Henry Bances explica que mientras el alza de los commodities encareció el precio de los alimentos. El incremento del dólar o la incertidumbre política reflejada en el dólar tuvo un impacto más transversal.

De igual modo, Bances señaló que el gas natural, el cual tiene una actualización tarifaria mensual en dólares al igual que el precio de la electricidad, los cuales también han registrado un ajuste en el mes de Junio.

A esto se suma que más del 60% de los combustibles que usamos son importados, por lo tanto, se adquieren en dólares. También, los precios de servicios como los alquileres o el de bienes de consumo duradero se han encarecido con el incremento del dólar.

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